Galería interactiva con los principales sucesos políticos del país desde 1985 hasta el 2016. Colombia ha pasado por varias transformaciones que vistas a través de la caricatura nos ofrece una visión particular de la realidad colombiana. Síguenos
El 6 de noviembre de 1985, guerrilleros del M-19 se tomaron el Palacio de Justicia -sede del poder judicial colombiano- en la operación ”Antonio Nariño por los Derechos del Hombre”. En respuesta a la toma, las fuerzas militares ingresaron al edificio forzosamente aun cuando la vida de decenas de rehenes corría peligro. Durante los enfrentamientos murieron decenas de personas y al día de hoy no se ha esclarecido el paradero de algunos desaparecidos. Caricatura de Vladdo
El 13 de noviembre de 1985 el país atravesó uno de los desastres naturales más profundo ha dejado su huella en la memoria nacional. El volcán Nevado del Ruiz erupcionó y la población de Armero, ubicada a 50 kilómetros del volcán, desapareció literalmente del mapa. Cerca de 20.000 personas murieron, el 70% de la población total. Geólogos y otros expertos advirtieron al gobierno nacional y los gobiernos locales sobre el riesgo en el que se encontraba el municipio de Armero.
La Unión Patriótica (UP), partido fundado el 28 de mayo de 1985, surgido de las guerrillas de las FARC, firmó un acuerdo de paz con el Estado colombiano encabezado por Belisario Betancur. La UP se configuró como un movimiento político, pero en un periodo de 10 años, cerca de 3000 militantes y simpatizantes fueron exterminados sistemáticamente por grupos paramilitares, miembros de las fuerza pública y narcotraficantes. Caricatura de Matador
En medio de una crisis por el narcotráfico, el asesinato de figuras políticas, el paramilitarismo y las guerrillas La Séptima Papeleta fue una propuesta que se llevó a cabo de manera no oficial impulsada por el movimiento estudiantil colombiano. Consistía en que se incluyera en las elecciones del 11 de marzo de 1990 una papeleta para apoyar una convocatoria para la realización de una Asamblea Nacional Constituyente, que finalmente se hizo en 1991. Caricatura de Osuna
Luego de 105 años, desde 1886, Colombia renovó su Carta Magna. En el año de 1991, se llevó a cabo la Asamblea Nacional Constituyente. Tras el impulso de la séptima papeleta y la aprobación de los resultados extraoficiales por la Corte Suprema de Justicia, se convocó la elección de 70 delegatarios que encabezaron la Asamblea. Caricatura de Jorge Grosso
Luis Carlos Galán fue un economista, abogado, periodista y líder político colombiano. En plena campaña a la presidencia fue baleado; el 18 de agosto de 1989 pocos minutos antes de comenzar un discurso en el municipio de Soacha, Cundinamarca. Los narcotraficantes Pablo Escobar y Gonzalo Rodríguez Gacha y el político liberal Alberto Santofimio fueron los autores intelectuales del magnicidio, ejecutado con el apoyo de fuerzas del Estado. Caricatura de Beto Barreto
Con 3.733.366 votos en las elecciones presidenciales de 1994, Ernesto Samper se convirtió en el presidente número 55 de Colombia. Durante 2 años, la Fiscalía y la Corte Suprema de Justicia, investigó sobre la financiación de las campañas políticas por parte de carteles de narcotráfico en el país. El expediente 8000 en 1996 llegó a la Comisión de acusación del Senado que determinó absolver a Samper en un juicio político realizado por aquella institución. Caricatura de Vladdo
El 7 de enero de 1999, durante la presidencia de Andrés Pastrana (1998-2002), se hicieron oficiales los diálogos de Paz entre el gobierno y el grupo revolucionario FARC-EP, liderado por Manuel Marulanda. El acuerdo de Paz terminó siendo un rotundo fracaso; las FARC, el principal grupo guerrillero del país y el gobierno no terminaron el conflicto y tras el cese de las mesas de dialogo, la guerra contrainsurgente por parte del Estado y los grupos paramilitares se fortaleció. Caricatura de Vladdo
El 13 de agosto de 1999, el reconocido humorista político Jaime Garzón fue asesinado cerca de los estudios de Radionet en la ciudad de Bogotá. El asesinato fue llevado a cabo por orden de Carlos Castaño, principal líder de las AUC. Garzón hoy en día se ha convertido en un símbolo de la sátira y la crítica política; además de ser reconocido por su trabajo como gestor de paz en la liberación de secuestrados. Caricatura de Vladdo
En el 2008, durante el segundo gobierno de Álvaro Uribe (2006-2010), se conoció la desaparición forzada y la ejecución extrajudicial de miles civiles, llevadas a cabo por integrantes de las fuerzas militares. Según cifras de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el número de ejecuciones perpetradas entre el 2000 y el 2010 en este gobierno es aproximadamente de 5.763. Caricatura de Mheo
Cuando Álvaro Uribe Vélez llegó a la presidencia en el 2002 se inició un desarme y desmovilización de 34 bloques de las AUC. En noviembre de 2003 se inicia la desmovilización de 31.600 integrantes de estos grupos armados. En ese mismo período se destapó la relación entre políticos y paramilitares, conocida como la “parapolítica”, el proceso de desmovilización también fue fraudulento pues se denunció que el número de personas había sido aumentado falsamente en un 50% Caricatura de Osuna
Durante el 2012 y el 2016 la guerrilla de las FARC, y el gobierno nacional adelantaron un diálogo del que surgiría el ''Acuerdo final para la terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz estable y duradera''. El golpe más duro para el Acuerdo fue el resultado del plebiscito del 2 de octubre de 2016: El sí tuvo una votación de 49.78% y el No una del 50.21%. El resultado sumió a la sociedad civil y a los dirigentes políticos en una profunda división. Caricatura de Turcios
Un recorrido por los lugares más icónicos de Bogotá vistos a través de los ojos de varios caricaturistas
Una mirada a diversos personajes de la política colombiana y cómo los han visto algunos caricaturistas
“A este país le hace falta reírse bastante de lo que está pasando para tratar de liberarnos un poquito de ese malestar que nos genera todos los días esta situación”: Yeyo
Foto tomada de www.unipamplona.edu.co
Alfredo Ramírez, conocido como Yeyo, es uno de los caricaturistas más importantes en el país. Inició su trayectoria en 1998 y a pesar de que tuvo una pausa prolongada, hoy es un reconocido caricaturista. Comunicador Social y Periodista de profesión, Yeyo actualmente trabaja como caricaturista activo en el diario La Opinión; además de ser Coordinador Técnico en Diseño de la Universidad de Pamplona.
Alejandro Duarte: ¿Cómo nació la pasión por dibujar?
Yeyo: La pasión por dibujar la he tenido toda la vida, desde muy pequeño. En mi casa, la influencia de una hermana que es arquitecta me motivo a empezar y a “rayar papel”. Mi mamá siempre estuvo pendiente de eso y me suministraba materiales: hojas lápices y colores; le gustaban los dibujos que yo hacía. Entonces, toda la vida he estado “rayando papel”, como digo yo.
AD: ¿Cómo decidió ser caricaturista?
Yeyo: En mi carrera. Estudié Comunicación Social y Periodismo en Universidad Autónoma de Bucaramanga, tenía la inquietud del dibujo. Fue una forma de complementar mi formación profesional.
Decía, entonces, que me gustaría aplicar los conocimientos adquiridos en la universidad en el periodismo y la comunicación, en ese caso el dibujo. Y fue así como desde la universidad empecé a hacer caricaturas de los profesores, de los compañeros, de situaciones y temas de actualidad; y poco a poco me fui metiendo en ese trabajo y me quedo gustando. Y en eso estoy desde hace bastante tiempo
AD: ¿Cómo fue el inicio de su carrera?
Yeyo: Lo que pasa es que antes no tenía la visibilidad que tienen las redes sociales. Estoy haciendo caricaturas con intervalos, entre temporadas; y empecé por el año de 1998 en el diario La Opinión. Empecé haciendo caricaturas, luego tuve unos años de pausa para dedicarme a otras cosas y retomé nuevamente en el 2011 este oficio.
Al inicio fueron exactamente las mismas temáticas que se manejan ahora: política, economía, situación social, desempleo pensiones, etc. Todas las temáticas se mantienen vigentes porque somos un país donde lo que pasó hace 30 años sigue pasando todavía. Entonces no veo que haya mucha evolución en ese tema, solamente cambian los protagonistas.
AD: ¿Cómo ve el mercado laboral?
Yeyo: Me parece que siempre ha estado bastante difícil. Este no es un oficio en el que uno diga “Me voy a dedicar solamente a esto y vivo de ello”. Yo tengo otro trabajo como diseñador en la Universidad Pamplona.
Realmente, las caricaturas las hago, pues sí, por una remuneración económica, pero más por mantener una presencia en un medio de comunicación como es el diario de La Opinión de Cúcuta. Yo estoy muy agradecido porque siempre he tenido el espacio para publicar. Entonces, es difícil. No es sencillo dedicarse solamente a esto y toca siempre esforzarse para conseguir que los medios reciban las publicaciones.
AD: ¿Cuál ha sido su mayor motivación a lo largo de estos años?
Yeyo: Mi mayor motivación es ver el trabajo publicado en un medio, regional en este caso, como el diario La Opinión; y ver la recepción, la acogida que tienen mis caricaturas por la gente. Con las redes sociales es mucho más fácil hacerlas visibles y eso me ha permitido que mucha gente más conozca lo que yo hago, entienda la situación del país a través de una viñeta, se cuestionen, quieran investigar más o simplemente sacarles una sonrisa a las personas cuando la caricatura lo permite.
Para mí, esa es la motivación más grande: el reconocimiento de la gente; y de pronto las palabras de aliento que lo motivan a uno a seguir trabajando en este tema.
AD: ¿Se ha autocensurado?
Yeyo: Sí lo he hechó, sobre todo en temas como religión y fútbol. Respeto las creencias de cada quien y me parece que meterse en esos temas -hacer una caricatura satirizando las creencias de un persona- no es adecuado. En el fútbol porque genera demasiada pasión en algunas personas. Esto con las noticias de asesinatos por el hecho de portar una camiseta de otro equipo. Entonces, no me gusta meterme mucho con esos temas. De fútbol sí hago caricaturas, pero no directamente relacionadas con algún equipo en particular. Esa sería la única forma autocensura que yo me he hecho. En política sí se le da “palo” a todo el mundo por igual.
AD: ¿Cómo es el gremio de los caricaturistas?
Yeyo: El gremio de caricaturistas es extremadamente solidario. Conozco a varios de los caricaturistas del país y aparte de ser excelentes en su trabajo, son excelentes personas, también. Beto Barreto, Alberto Martínez (Betto), Cristian (X-tian), Nadim y varios otros que he tenido la oportunidad de conocer, en Bogotá, para una exposición o intercambiar ideas. Con muchos hemos reído, hemos hablado.
Entonces, pienso que en todo momento, tanto profesional como personalmente, uno siempre puede contar con los colegas. Todos los que conozco hasta ahora son unas excelentes personas.
AD: ¿Por qué el oficio del caricaturista es importante para el país?
Yeyo: El trabajo de nosotros, los caricaturistas, es importante porque nos permite presentar la realidad del país de una forma diferente a una noticia tradicional. Nosotros resumimos, a veces, en una sola viñeta algo que está pasando. Mucha gente no tiene el tiempo suficiente para leer la noticia completa y ven una caricatura y les causa curiosidad o inquietud; más adelante, cuando tengan tiempo van a tratar de leer un poco más sobre el tema.
Aparte, nosotros tenemos cierta licencia para burlarnos de los poderosos políticos de este país. Entonces, esto nos permite cierto nivel de “impunidad”, como lo llamó, sobre la sátira. Creo que a este país le hace falta reírse bastante de lo que está pasando para tratar de liberarnos un poquito de ese malestar que nos genera todos los días esta situación.
Proyecto realizado dentro de la asignatura DIRECTO TRANSMEDIA de la carrera de Comunicación Social bajo la
Dirección de Carlos Obando Arroyave / Producción y realización: Alejandro Duarte Cháves